viernes, 24 de junio de 2022

Colombia, el tercer país de la región con más estaciones de carga públicas y privadas

Colombia, el tercer país de la región con más estaciones de carga públicas y privadas

Conforme aumenta el parque automotor sostenible en el país, entre vehículos eléctricos e híbridos, las estaciones de carga y los conectores que les brindan autonomía, también lo hacen.

Según datos del portal electromaps.com, Colombia ya cuenta con 202 estaciones de carga entre públicas y privadas y 475 conectores. Esto significó, en comparación con octubre de 2021, un aumento de 30,3% para las estaciones de carga y de 36,5% para los conectores.

Según cifras de Andemos, el parque ha venido creciendo constantemente, y cada vez a un ritmo más acelerado, a partir de 2011, cuando llegó el primer carro sostenible al país.

Para José Stalin Rojas, director del Observatorio de Movilidad de la Universidad Nacional, la cantidad de puntos de recarga en las ciudades depende de varios factores y no solamente de la cantidad de vehículos eléctricos, como normalmente se cree.

“Se debe tener en cuenta la posibilidad de que las personas recarguen el vehículo por las noches en sus casas, la extensión de la ciudad o la velocidad de la carga en puntos públicos”.

Vale la pena aclarar que actualmente existen tres tipos de vehículos ‘verdes’. BEV se le denominan a los automóviles cuya única fuente de poder es una batería. En este caso, son carros 100% eléctricos que no necesitan de ningún combustible para operar. Al tener en cuenta los datos hasta 2021, 2020 fue el año en el que más unidades de este tipo se registraron en el país, cuando llegaron 1.308 vehículos.

El segundo tipo de estos modelos eléctricos es HEV, o también conocidos como híbridos. Estos, a pesar de que no se pueden recargar a través de un conector, funcionan de manera simultánea con un motor que sí consume algún tipo de combustible. Dependiendo de la tecnología del vehículo, la batería puede impulsar el vehículo, mientras que el motor a gas (o gasolina), la recarga.

Este es el modelo más común en el país y, para 2021, su registro en el Runt estuvo a pocas unidades de alcanzar las 14.700. Para dicho año, esto significó un aumento de 247% cuando se compara con el año anterior. En lo que va del año con corte a marzo, se han inscrito 3.841 vehículos de este tipo.

El último tipo es el Phev que, si bien es muy parecido a los HEV, este modelo tiene una batería con una capacidad mayor, pues mientras los HEV tienen una autonomía de entre 3 KM y 5 KM, estos llegan a los 60 KM. Los Phve, al igual que los BEV, se pueden enchufar, lo que le permite cargar la batería directamente con electricidad o con el impulso del motor a gas.

Rojas agregó que la venta de vehículos eléctricos avanza a buen ritmo en Colombia y a la par debería ir el aumento de las zonas de recarga. “Afortunadamente, esto aún no afecta la movilidad de este tipo de vehículo”, agregó.

En cuanto al panorama latinoamericano, Colombia se encuentra en el Top 3 de países con más estaciones. Sólo Brasil y Chile están por delante con 282 y 248 respectivamente. Sin embargo, países como Uruguay y Ecuador, que tienen un área mucho menor al resto, presentan 90 y 58 estaciones respectivamente.

Argentina, pese a su parque automotor, cuenta con 22 estaciones, Paraguay con 39 y Perú con 38. Venezuela y Bolivia cuentan con 3 estaciones cada uno.

Entre las ciudades que poseen más estaciones se puede encontrar en la cima a la capital, Bogotá, en donde hay 45 y a Medellín con 23. Pereira y Cali se encuentran después con 11 y seis estaciones respectivamente.

Según Rojas, el número de las estaciones también depende la rentabilidad esperada pues, para que esta llegue a ser “decente”, se deben presentar entre ocho a 10 recargas al día.


Bogotá, con 96 puntos, lidera en estaciones de recarga para los vehículos eléctricos

Colombia continúa apostándole a la energía eléctrica como fuente alterna en los procesos de movilidad. Gracias al aumento del transporte eléctrico, diferentes empresas distribuidoras de energía eléctrica buscan incrementar los puestos de carga en todo el territorio nacional.

Según cifras de Electromaps, Bogotá se mantiene como primera en el ranking, con 96 conectores de carga distribuidos en 44 locaciones indica, que logran abastecer a miles de vehículos eléctricos e híbridos que le han apostado a reducir su huella medioambiental.

Medellín, con 17 estaciones de carga, y Cali con 10, se posicionan junto a Bogotá como las ciudades con mayor oferta de carga eléctrica. En la región Caribe el proceso avanza de una manera más lenta, contando con 5cincoestaciones de carga en todo el territorio.

Así mismo, hay una serie de empresas que llevan la delantera en la competencia por ofrecer estaciones de carga. Entre las que están apostándole a la movilidad eléctrica a nivel nacional están EnelX que cuenta con dos líneas de estaciones de carga; Terpel con 10 estaciones de carga; Volvo, que adecuó módulos en sus diferentes concesionarios; Motorysa, con dos centrales, y Oasis Group, que opera 46 estaciones de carga a nivel nacional.

Las últimas cifras indican que más de 8.000 automóviles eléctricos circulan por las vías del rentado nacional; estos se ven amparados por La Ley de Vehículos Eléctricos expedida en julio de 2019 por el Congreso de la República. Esta última regula los procesos de ventas de los diferentes modelos de vehículos y obliga a las autoridades locales a establecer puntos de cargas en las diferentes ciudades del país.

El modelo mediante el cual funcionan los puntos de carga en el país le facilita al usuario su experiencia, al llegar al parqueadero o punto de carga, el conductor debe informarle al personal sobre la necesidad del uso del cargador, el modelo de su vehículo y la disponibilidad de este. Punto seguido este será dirigido a la celda correspondiente y el usuario debe retirar la manguera del soporte y conectarla en el puerto del vehículo. Al finalizar el propietario desconectará la manguera y la dejara en la base para que esta pueda ser nuevamente utilizada.





¿Cómo manejan sus residuos contaminantes las empresas de telecomunicaciones?

¿Cómo manejan sus residuos contaminantes las empresas de telecomunicaciones?

Los cables, antenas y circuitos para llevar señales a largas distancias se convierten, tarde o temprano, en residuos. Mediante la actualización de sus redes, las empresas de telecomunicaciones no solo intentan subsanar las necesidades de conexión de sus clientes; también buscan la reutilización de elementos claves para sus diferentes operaciones.

En el caso de Furukawa Electric (empresa de telecomunicaciones) está desarrollando un programa de reciclaje denominado Green IT. Por medio de este, busca optimizar el tratamiento de los residuos procedentes de cables de cobre que ya completaron su ciclo de vida y reemplazarlos por soluciones amigables con el medio ambiente. Para ello, según informó, apunta a soluciones Green que utilizan materiales derivados de la caña de azúcar, contribuyendo a la reducción de los efectos del cambio climático a largo plazo.

El programa Green IT de Furukawa Electric opera desde 2007. La iniciativa está centrada principalmente en optimizar el tratamiento de los residuos procedentes de cables de cobre. A través de un conjunto de acciones articuladas entre el fabricante, socios de negocios y clientes, se pretende reducir significativamente la utilización de recursos no-renovables, ahorrar energía y proteger el medio ambiente de materiales nocivos.

“La gestión de residuos es fundamental para reducir el impacto en nuestro entorno puesto que muchos de ellos pueden ser perjudiciales para el medio ambiente. Esto es algo que impulsamos y promovemos con nuestros socios de negocios, es nuestra forma dejar una huella en la labor que realizamos”, comenta Jhon Richard Martín, gerente de soluciones de cableado para región Andina, Centroamérica y Caribe en Furukawa Electric Latam.

Por otro lado, la empresa con mayor presencia en el país, Claro, está desarrollando labores de reciclaje de elementos como plástico y metales, que retornan al ciclo productivo permitiendo una reducción en extracción de materias primas. Estas acciones se alinean con las estrategias del grupo económico que busca alcanzar la meta de ser una empresa neutral en 2050 en materia de eficiencia energética.

En el caso de Nokia, marca con presencia en diferentes mercados a nivel mundial, anunció recientemente que alista la llegada de redes móviles 5G, diseñadas para alcanzar objetivos de sustentabilidad energética y baja en emisiones de CO2. Además, la empresa se embarca en procesos de reciclaje con la intención de reducir los daños medioambientales que genera su operación.

“Estamos listos para apoyar la transformación digital en los sectores de transporte, manufactura y energía. La digitalización de la industria es una gran habilitadora para enfrentar los retos actuales asociados a la mejora en la eficiencia y la seguridad en los procesos productivos, la reducción de costos y la progresiva descarbonización de los sectores industriales”, dice Paolo Veglio, country director de Nokia Colombia.

En el caso de Telefónica, ha implementado políticas de reciclaje de cobre. La materia prima era pilar fundamental de las antiguas centrales tecnológicas de la compañía, así como de la red de cableado fija. La sustitución de los diferentes componentes a base cobre han permitido ahorrar 1.000 GWh de energía, lo que ha implicado evitar la emisión de 355.000 toneladas de CO2 a la atmósfera. Por último, señaló que sus nuevas instalaciones cuentan con fuentes de energía alternativa.